La infanta Cristina pone el grito en el cielo por el intento de apartar a su madre de los Premios Princesa.
La infanta Cristina no está de acuerdo con la decisión de Felipe VI.
Este viernes 24 de octubre se celebran los Premios Princesa de Asturias.
Una nueva edición con importantes cambios, ya que aunque Felipe VI, Letizia y la infanta Sofía estarán presentes para acompañar a Leonor, la princesa será la única y gran protagonista del acto.
El actual monarca siempre tenía unas palabras de cierre, pero ahora ese discurso también recaerá en la futura heredera.
Este año, ahora que las dos hijas de los reyes tienen la mayoría de edad, Casa Real ha decidido que empiecen a participar más en los actos institucionales aunque sin desviarse de sus respectivas formaciones, que a día de hoy es lo más importante.
La gran duda es si en el teatro Campoamor de Oviedo la acompañarán como todos los años hasta la fecha, Paloma Rocasolano y la reina Sofía.
En los últimos años, la emérita se ha fotografiado con ellos, y aunque se ha sentado en un palco, ha tenido un cierto protagonismo, más que la madre de Letizia que debe pasar desapercibida.
La reina Sofía no atraviesa un buen momento debido a la depresión que padece, según Pilar Eyre.
Este estado anímico estaría afectando a su salud, algo peligroso ya que en tan solo una semana cumplirá 87 años.
Felipe VI sabe que su madre es muy mayor y en alguna ocasión ya ha intentado retirarla de la corona porque cree que ya ha cumplido un ciclo y debe descansar los últimos años de su vida.
Sin embargo, la mujer de Juan Carlos I siempre ha sido muy cabezona y se niega a renunciar al cargo.
Si no fuese por las polémicas del emérito, a ella le hubiese gustado morir con las botas puestas. De hecho, hubiese sido así.
La reina Sofía podría no asistir a los premios Princesa de Asturias.
Ahora mismo la reina Sofía tampoco se plantea abandonar el cargo, pero sabe que su cuerpo ya no es el mismo.
Según fuentes cercanas a Zarzuela, se ha vivido una fuerte discusión entre madre e hijo porque Felipe VI cree que la reina Sofía ya no está preparada para asistir a los Premios Princesa de Asturias.
La infanta Cristina, también muy testaruda, y defensora de su madre, no le ha gustado nada que Felipe VI tome esta decisión.
La reina Sofía está en un momento muy triste de su vida y lo que menos le conviene es que se la aparte de momentos por los que ella siente una gran alegría.
Los hermanos han discutido pero todavía no se ha llegado a ninguna decisión final.
Es probable que el monarca termine haciendo caso a su hermana y la emérita aparezca por Oviedo para apoyar a su nieta.
La discusión entre Felipe VI y la reina Sofía ha sido intensa, según fuentes cercanas a la Zarzuela.
El monarca, convencido de que su madre ya no está preparada para enfrentarse al ritmo y la exposición de los grandes eventos, ha intentado persuadirla de que lo mejor para ella es no asistir a la gala de los premios.
Pero Sofía, fiel a su carácter tenaz y a su sentido del deber, ha rechazado la idea de ser apartada, argumentando que su presencia es importante tanto para su familia como para la institución que ha representado durante tantos años.
La infanta Cristina, por su parte, ha intervenido en la disputa con firmeza, defendiendo a su madre y cuestionando la decisión de su hermano.
Cristina considera que la exclusión de Sofía no solo es injusta, sino también contraproducente para el estado emocional de la reina emérita.
En su opinión, privar a Sofía de momentos de alegría y reconocimiento público solo contribuye a agravar su tristeza y su sensación de aislamiento.
La infanta ha insistido en que su madre debe estar presente en Oviedo para apoyar a su nieta, la princesa Leonor, en un momento tan significativo para la familia y para la monarquía española.
La controversia ha generado un clima de tensión en la Zarzuela, donde los hermanos han mantenido intensas conversaciones para tratar de llegar a un acuerdo.
Aunque todavía no se ha tomado una decisión definitiva, todo apunta a que Felipe VI podría ceder ante la presión de Cristina y permitir que la reina Sofía asista finalmente a la ceremonia.
La presencia de la emérita sería, sin duda, un gesto de unidad familiar y de respeto hacia una figura que ha sido clave en.
