Marta Flich se lanza a llamar así a Carlos Mazón y le da la puntilla con una frase final para la posteridad.
Marta Flich tilda a Carlos Mazón como “el president del bulo” y denuncia la mediocridad que ha demostrado en su discurso de retirada.

Marta Flich ha puesto en su sitio a Carlos Mazón nada más oírle en su declaración institucional en la que ha anunciado su dimisión como president, manteniendo el escaño para conservar la condición de aforado y la protección ante la justicia, y en la que acusado al Gobierno Central de abandono en las primeras horas de la DANA y en la actualidad.
Ha dicho que “la falta de ayuda en las primeras horas fue clamorosa” y que “aún lo sigue siendo”.
“Queríamos ayuda, la pedimos y jamás la recibimos”, ha llegado a afirmar.
En todo momento, el político del PP ha echado balones fuera, se ha presentado como víctima y ha mentido hasta el último segundo sin pudor alguno.
Mazón ha sostenido su teoría del apagón informativo una vez más, algo que ya la jueza de Catarroja desmontó en la instrucción, y ha acusado a la Confederación Hidrográfica del Júcar y a la AEMET de no hacer su trabajo y de no avisar. Otra mentira más.
En paralelo, y como prueba de la bajeza política que impera, Carlos Mazón ha dejado una frase que ha sido interpretada como un vil ataque a Pedro Sánchez.
“Espero que cuando baje un poco el ruido la sociedad pueda distinguir a un hombre que se ha equivocado de una mala persona”.
Ante esta indigna comparecencia con la que adelantaba su retirada, Marta Flich se ha mojado a fondo en sus redes sociales.
La presentadora de La 1 de TVE ha puesto un primer post en la red social X evidenciando las falsedades por minuto que estaba pronunciando en su discurso: “Mazón no se baja de la mentira ni un solo día”.
Y no se ha quedado ahí, pues Marta Flich ha elevado el tono y ha calificado a Mazón como “el President del BULO“.
“Se va sin aclarar absolutamente NADA y en un ejercicio de mediocridad sin precedentes”, ha sentenciado la comunicadora sin ambages.
La reacción de Marta Flich y de otros periodistas comprometidos pone en primer plano el debate sobre la dignidad y la responsabilidad en la política.
La falta de transparencia, la negativa a asumir errores y la utilización de argumentos falsos han sido elementos recurrentes en la gestión de Mazón, generando un rechazo generalizado y alimentando el debate sobre los límites de la responsabilidad política.
La exigencia de rendición de cuentas y de respeto por la verdad se convierte así en una demanda central para la sociedad valenciana y española.
El impacto mediático de la comparecencia de Mazón y de la reacción de Flich ha trascendido el ámbito digital, convirtiéndose en tema central en los principales medios de comunicación.
Las portadas de los diarios nacionales y autonómicos han recogido la noticia, destacando la singularidad de la dimisión y el revuelo generado por la actitud del expresident.
La opinión pública, por su parte, ha manifestado su malestar a través de las redes sociales y de movilizaciones ciudadanas que exigen transparencia, justicia y reparación para las víctimas de la DANA.
El futuro político de la Comunidad Valenciana queda ahora en manos del Partido Popular y Vox, partidos que deberán consensuar la sucesión de Mazón y afrontar el reto de recuperar la confianza ciudadana tras una gestión cuestionada y una salida del poder marcada por la polémica.
La crisis interna del PP, agravada por la gestión de la DANA y por la actitud de Mazón, pone en evidencia la fragilidad de los consensos y la dificultad de superar el desgaste reputacional derivado de decisiones controvertidas.
La intervención de Marta Flich, lejos de ser una mera opinión, se convierte en un ejemplo de periodismo crítico y de compromiso con la verdad.
Su capacidad para señalar las contradicciones del poder político y para dar voz a las víctimas refuerza el papel de los medios de comunicación como contrapeso necesario en una democracia.
La frase “el President del BULO” resume el sentimiento de indignación y de exigencia de justicia que recorre a la sociedad valenciana y española tras la dimisión de Mazón.
En definitiva, la crisis política valenciana y la reacción de Marta Flich son una llamada de atención sobre la importancia de los valores éticos en la gestión pública y sobre el papel fundamental de la sociedad civil y de los medios de comunicación en la defensa de la democracia.
La dimisión de Mazón, criticada por periodistas comprometidos y celebrada por las víctimas, es el reflejo de una sociedad que exige justicia, dignidad y responsabilidad en el ejercicio del poder.
La exigencia de rendición de cuentas y de respeto por la verdad será clave para garantizar que tragedias como la DANA no vuelvan a repetirse sin una gestión adecuada y transparente.