Antonio García Ferreras estalla en directo contra Carlos Mazón: “Un político indigno que convirtió el homenaje a las víctimas en un aplauso para sí mismo”
Ferreras en Al Rojo VivoAl Rojo Vivo
El ambiente se caldeó este miércoles en el plató de Al Rojo Vivo, el programa matinal de La Sexta dirigido por Antonio García Ferreras, tras la emisión de la declaración institucional del presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, con motivo del primer aniversario de la tragedia de la DANA de 2024, que dejó 229 víctimas mortales en la Comunidad Valenciana.
Lo que debía ser un acto solemne en recuerdo de los fallecidos terminó convirtiéndose, según Ferreras, en “una escena vergonzosa de autopromoción política”.
El periodista no se contuvo al ver cómo Mazón era aplaudido en pie por los miembros de su propio gobierno tras su discurso en el Palau de la Generalitat.
Un año después, demasiadas preguntas sin respuesta
Ha pasado un año desde la catastrófica DANA del 29 de octubre de 2024, pero todavía no se ha esclarecido del todo qué hizo Carlos Mazón aquella tarde, mientras centenares de valencianos luchaban por sobrevivir al temporal más devastador de las últimas décadas.
Durante su intervención, el presidente autonómico anunció que cada 29 de octubre será declarado día oficial de luto en la Comunidad Valenciana, en memoria de las víctimas de la tragedia.
Asimismo, reconoció —por primera vez de forma pública— que “hubo cosas que debieron funcionar mejor”.
Sus palabras parecían buscar reconciliación, pero lo que desató la polémica fue la reacción de su gabinete, que se levantó para aplaudirle con fervor al terminar el discurso.
Ferreras, sin filtros: “Los pelotas”
Desde el plató de Al Rojo Vivo, Ferreras no ocultó su indignación ante las imágenes.
En pleno directo, se dirigió a su colaborador Alan Barroso y exclamó:
“Fíjate en este momento, Alan, porque hoy Carlos Mazón ha convertido una declaración institucional por las víctimas —229 muertos— en una especie de homenaje a sí mismo.
Con aplauso incluido de sus cargos.
Los pelotas.”
El presentador elevó el tono aún más cuando observó cómo varios consejeros se ponían en pie para aplaudir al presidente durante más de dos minutos:
“Siguen los aplausos.
Se levantan, se ponen en pie… Dos minutos de aplauso a este personaje, a este político indigno que no supo estar donde debía.
Estuvo comiendo desde las tres de la tarde hasta las 18:45, mientras se ahogaban los valencianos.”
Ferreras cerró el bloque con un rostro visiblemente molesto antes de dar paso a publicidad, en un gesto mezcla de incredulidad, rabia y tristeza.
“Pero qué aplauden”, se ha repetido en varias ocasiones con un vídeo de lo ocurrido.
El eco de la indignación: Ana Pastor también se pronuncia
La periodista Ana Pastor, también de La Sexta, se mostró igualmente sorprendida por la escena del aplauso.
La noche anterior, Pastor había entrevistado a Mazón en un tenso intercambio televisivo, cuestionando las contradicciones en su relato sobre su comida con Maribel Vilaplana el día de la catástrofe.
En redes sociales, Pastor expresó su perplejidad ante el tono del acto institucional, compartiendo el fragmento del vídeo con un simple comentario:
“No tengo palabras.”
Su reacción se sumó a la de numerosos periodistas, ciudadanos y figuras políticas que coincidieron en calificar la actitud del entorno de Mazón como “una falta de respeto hacia las víctimas y sus familias”.
Un gesto que reabre heridas
La tragedia de la DANA de 2024 dejó imágenes imborrables en la memoria colectiva: carreteras inundadas, viviendas arrasadas, rescates desesperados y un balance devastador de 229 fallecidos. Desde entonces, las críticas hacia la gestión del gobierno valenciano no han cesado.
Los detractores de Mazón han subrayado la falta de transparencia sobre su paradero y sus decisiones en aquellas horas críticas, mientras que sus defensores insisten en que nadie podría haber previsto la magnitud de la catástrofe.
Sin embargo, el aplauso en el Palau de la Generalitat ha reabierto las heridas.
Para muchos, fue un gesto fuera de lugar. Para otros, una muestra más del distanciamiento entre los dirigentes y la realidad de las víctimas.
Ferreras, la voz de la indignación televisiva
No es la primera vez que Antonio García Ferreras se muestra contundente frente a lo que considera una banalización del sufrimiento colectivo.
En esta ocasión, su enfado no fue solo profesional, sino profundamente emocional.
“Esto no es política, es humanidad. No se puede convertir el recuerdo de 229 muertos en una ovación personal.
Es inaceptable.”
Las redes sociales se inundaron rápidamente de mensajes apoyando la reacción del periodista.
“Ferreras ha dicho lo que muchos pensamos”, escribió una usuaria en X. Otros, sin embargo, criticaron el tono excesivamente duro del presentador.
Sea como sea, la polémica está servida. Un acto que debía unir a todos en la memoria de las víctimas ha terminado generando una nueva fractura política y mediática.
Y, una vez más, la televisión se ha convertido en el espejo de un país donde el dolor y la política parecen condenados a convivir.
