Algo sin precedentes está a punto de ocurrir en la historia reciente de España. En las próximas horas, Pedro Sánchez afrontará una comparecencia en el Senado que, según fuentes parlamentarias, podría marcar un antes y un después para el Gobierno. Desde Moncloa se intenta restar importancia al asunto, pero la oposición habla de un hecho “nunca visto en la democracia española” y las alarmas ya han saltado. Nadie confirma los detalles, pero todo apunta a que las acusaciones que planean sobre el Ejecutivo podrían haber forzado esta intervención extraordinaria. Los movimientos de última hora, el silencio calculado del PSOE y el nerviosismo entre ministros refuerzan la sensación de que algo grande se está gestando. Mientras los focos apuntan al Senado, la expectación crece dentro y fuera del país. ¿Se trata de una simple explicación política… o del inicio de un capítulo que podría cambiar la historia del Gobierno?|TH

A diferencia de Zapatero, la comparecencia de Sánchez se deriva de una trama de corrupción interna del PSOE

Pedro Sánchez hará historia como el primer presidente del Gobierno que comparece en el Senado por corrupción.

Será el segundo presidente de la democracia en declarar ante una comisión de investigación, tras Zapatero en 2004.

A diferencia de Zapatero, la comparecencia de Sánchez se deriva de una trama de corrupción interna del PSOE.

El exgerente del partido, Mariano Moreno Pavón, vincula los sobres del informe de la UCO a pagos para el equipo de Koldo.

Por su parte, el exsecretario de Organización, Santos Cerdán, sigue en prisión tras seis meses en Soto del Real.

La comisión se celebrará mañana desde las 9:00 horas y podría prolongarse hasta pasada la media tarde.

Sánchez responderá preguntas de senadores de todos los grupos, siguiendo el orden de menor a mayor representación.

El antecedente de Zapatero se produjo por solicitud del Partido Popular sobre los atentados del 11-M en 2004.

Aquel caso dejó una huella imborrable en la ciudadanía y centró el debate en la gestión del Gobierno de entonces.

En contraste, la comparecencia de Sánchez se centra en irregularidades económicas y presunta corrupción en su partido.

La comisión buscará esclarecer el destino de fondos y la implicación de altos cargos del PSOE en la trama interna.

La declaración del presidente se produce en un contexto político complejo, con tensión entre los grupos del Senado.

Los senadores interrogarán a Sánchez sobre decisiones internas, informes de la UCO y responsabilidades del Ejecutivo.

Hombre de cabello corto y canoso con traje azul y corbata hablando en una reunión mientras gesticula con las manos.

La comisión de investigación lleva más de un año

Se espera que la sesión sea larga y que los senadores utilicen la oportunidad para cuestionar su gestión política.

La comparecencia genera gran expectación mediática por ser un hecho sin precedentes en España por corrupción.

Expertos señalan que el resultado podría marcar un precedente sobre la rendición de cuentas de altos cargos en democracia.

El presidente tendrá que explicar los pagos y la relación con Mariano Moreno Pavón y otros implicados en la trama.

Santos Cerdán sigue como uno de los puntos más polémicos, al no haber salido de prisión tras seis meses de detención.

La comisión contará con un protocolo estricto para la intervención de los senadores y el desarrollo de la sesión. Hombre de traje azul y corbata roja hablando frente a un micrófono con las manos extendidas

Pedro Sánchez hará historia como el primer presidente del Gobierno que comparece en el Senado por corrupción

Se espera que Sánchez mantenga un discurso centrado y detallado para responder a todas las preguntas sobre la investigación.

La jornada se prevé intensa, con comparecencias y réplicas que podrían prolongarse durante toda la mañana y tarde.

Analistas políticos anticipan que la comparecencia marcará la agenda de los medios y del debate parlamentario en los próximos días.

Este momento histórico subraya la importancia de la transparencia y de la rendición de cuentas en la política española.

El Senado se prepara para una sesión inédita, en la que un presidente en ejercicio afronta un interrogatorio por corrupción.

La comparecencia podría sentar un precedente sobre la obligación de los líderes políticos a responder ante comisiones de investigación.

Sánchez se convierte así en el primer presidente de la democracia en España en afrontar un examen directo por una trama corrupta.

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