Ayuso desata la polémica en la Asamblea de Madrid con su frase: “Son lo peor que ha tenido España”
Silvia Intxaurrondo, Javier Ruiz và Adela González trên trường quay La Hora de La 1 và Mañaneros.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha protagonizado este jueves uno de los momentos más comentados de la sesión plenaria en la Asamblea de Madrid.
En una semana marcada por el juicio en la Audiencia Nacional contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, la dirigente madrileña respondió con dureza a las preguntas de la diputada socialista Mar Espinar, dejando una frase que ya genera amplio debate: “Son lo peor que ha tenido España”.
Un pleno tenso y una respuesta incendiaria
Todo comenzó cuando Mar Espinar, diputada del PSOE, interpeló a Ayuso sobre los presupuestos regionales y, de paso, mencionó presuntos “fraudes fiscal y político” vinculados al entorno de la presidenta.
La socialista hizo referencia tanto a la pareja de Ayuso como a Miguel Ángel Rodríguez, su jefe de gabinete, acusando al Gobierno regional de actuar con falta de transparencia.
En su turno de réplica, la presidenta de la Comunidad evitó responder directamente a las acusaciones personales, pero cargó con fuerza contra el PSOE.
Con tono contundente, aseguró que los socialistas “están carcomidos por la corrupción” y que “gestionan de forma ruinosa”.
Acto seguido, lanzó su frase más polémica: “Son lo peor que ha tenido España”.
Con esa afirmación, Ayuso quiso vincular a su principal oposición con los casos judiciales que afectan a miembros del partido y con lo que considera una “estrategia política de acoso” contra jueces, fiscales y adversarios.
Reacciones dentro y fuera del Parlamento
Las palabras de Ayuso fueron recibidas con aplausos de los diputados del Partido Popular y con abucheos desde las bancadas de la izquierda.
En redes sociales, la frase no tardó en viralizarse, generando miles de comentarios entre quienes defendían su contundencia y quienes la acusaban de alimentar la crispación política.
La intervención también llegó a los programas informativos de la mañana, donde analistas y periodistas debatieron sobre el tono y el contenido de la comparecencia. Uno de los primeros en reaccionar fue el periodista Javier Ruiz, presentador del programa Mañaneros en TVE.
Durante el avance del programa, Ruiz afirmó que “la política de la hipérbole ha desbordado todo” y añadió que “acaba de decir que el Gobierno de Sánchez es lo peor que ha vivido España jamás; ni la peste, ni ETA, ni Franco… sino Sánchez”.
Con esa comparación, el comunicador quiso subrayar la exageración retórica que, a su juicio, domina el discurso político actual.
Ruiz concluyó su reflexión asegurando que “Ayuso se está despachando con un tono y unos descalificativos que habrá que analizar con lupa”, anticipando que el debate sobre el lenguaje político sería uno de los ejes centrales de su programa.
Un estilo combativo que no deja indiferente
No es la primera vez que Isabel Díaz Ayuso acapara titulares por su manera directa y combativa de expresarse. Desde su llegada a la presidencia de la Comunidad de Madrid, la líder popular se ha caracterizado por utilizar un discurso de confrontación con el Gobierno central, encabezado por Pedro Sánchez, y con sus adversarios políticos de izquierda.
Esa estrategia, que para sus seguidores representa “claridad y valentía”, es criticada por sus detractores, que la acusan de fomentar un clima de polarización en la política española.
Lo cierto es que su forma de comunicar suele provocar un gran impacto mediático y redes divididas entre apoyo y rechazo.
Contexto judicial y clima político
La sesión de este jueves se produce en un contexto particularmente sensible, ya que coincide con el desarrollo del juicio en la Audiencia Nacional contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, una causa que ha reavivado la tensión entre el Gobierno central y la oposición.
Ayuso, que en varias ocasiones ha denunciado lo que considera “operaciones orquestadas desde Moncloa” contra figuras judiciales y miembros del Partido Popular, aprovechó el pleno para reforzar su discurso sobre la supuesta instrumentalización de la justicia.
Desde el PSOE, sin embargo, consideran que la presidenta está utilizando este tipo de declaraciones para desviar la atención de los asuntos internos que afectan a su propio entorno político y personal.
Debate mediático y desgaste político
El intercambio entre Ayuso y Espinar ha abierto nuevamente el debate sobre los límites del lenguaje político en España.
Muchos analistas coinciden en que la escalada de descalificaciones está contribuyendo a la pérdida de calidad del debate parlamentario y a la desafección ciudadana hacia las instituciones.
El propio Javier Ruiz, durante su comentario en TVE, lamentó que la política se haya convertido “en un concurso de frases para titulares” en lugar de un espacio de reflexión sobre las soluciones que necesita el país.
En el entorno de Ayuso, no obstante, defienden que la presidenta “dice lo que piensa y no se esconde detrás de eufemismos”.
Según fuentes del Gobierno regional, su objetivo es “denunciar la hipocresía del PSOE” y dejar claro que “Madrid no se callará ante los ataques del Gobierno central”.
Una frase que marcará la semana
Mientras la Audiencia Nacional continúa con el proceso judicial que mantiene al fiscal general en el punto de mira, las declaraciones de Ayuso prometen seguir ocupando espacio en tertulias, portadas y redes sociales durante los próximos días.
La presidenta madrileña, fiel a su estilo, ha vuelto a demostrar que su discurso no busca el consenso sino la confrontación, una fórmula que, aunque arriesgada, le ha garantizado protagonismo político y apoyo entre los votantes más fieles de su partido.
Con su frase —“son lo peor que ha tenido España”—, Ayuso no solo ha provocado un terremoto político en la Asamblea de Madrid, sino que ha reavivado el debate sobre los límites del lenguaje en la política española, en un momento en que la tensión institucional parece no tener freno.
