José Ribagorda critica a ‘Sálvame’ al recordar su polémico paso con Pedro Piqueras en ‘Informativos Telecinco’

José Ribagorda, Paz Padilla y Pedro Piqueras
El periodista José Ribagorda ha sorprendido con unas duras declaraciones sobre el histórico programa de entretenimiento Sálvame durante su participación en En Primicia, la entrevista que La 2 de RTVE dedicó este miércoles a Pedro Piqueras, el mítico rostro de Informativos Telecinco.
En el especial, presentado por Lara Siscar, se repasaron los 17 años de trayectoria del periodista al frente de los informativos de Mediaset, pero también se revivió uno de los momentos más controvertidos de su carrera: el paso en directo entre Sálvame y el informativo nocturno.
Un momento televisivo que marcó una era
Durante varios años, Sálvame era el programa encargado de ceder el testigo al informativo de Telecinco.
Aquellas transiciones se convirtieron en un símbolo de la televisión española, pero también en un motivo de controversia.
El contraste entre el tono desenfadado del magacín de tarde y la seriedad del informativo generó escenas surrealistas, a menudo objeto de burla en redes sociales.
En Primicia recuperó uno de los fragmentos más recordados: un día en plena pandemia, Paz Padilla y Anabel Pantoja bailaban alegremente mientras Piqueras esperaba para entrar en directo con la dramática cifra de fallecidos por COVID-19. La cámara mostró al periodista visiblemente molesto, una imagen que rápidamente se volvió viral.
Ribagorda: “Era ridículo, sin lógica ni gracia”
Al recordar aquella etapa, José Ribagorda no dudó en criticar la decisión de la cadena de mantener esos pasos. Según el periodista, la mezcla entre entretenimiento y tragedia “no tenía ningún sentido”.
En sus palabras, “eran completamente ridículos; no tenían lógica, ni un porqué, ni gracia alguna”.
Ribagorda argumentó que, en un momento de tanta tensión social, la televisión debía cuidar más la transición entre la frivolidad y la información seria.
“Esa falta de sensibilidad dañaba la credibilidad del informativo y también el trabajo de quienes, cada noche, tenían que comunicar noticias difíciles al país”, señaló.
Sus palabras resonaron entre los presentes en el plató, conscientes del peso que aquellos años dejaron en la redacción de Informativos Telecinco.
Pedro Piqueras: “Tenía que entrar con mil muertos y ellos seguían bailando”
El propio Pedro Piqueras reconoció que vivió aquel momento con incomodidad.
Recordó que la situación le enfadó profundamente, pues sentía que se desdibujaba la línea que separa el entretenimiento del periodismo informativo.
“Tenía que empezar el informativo con casi mil fallecidos en España, y ellos seguían haciendo chistes y bailando.
No era el momento ni el lugar”, explicó el comunicador.
Pese al tono sereno de sus palabras, Piqueras dejó entrever que aquel episodio marcó un punto de inflexión. Según relató, tras la emisión, habló directamente con Paolo Vasile, entonces consejero delegado de Mediaset.
“Le dije que lo que vi anoche no me gustó, y me respondió que no me preocupara”.
La anécdota, aunque breve, dejó claro el choque entre dos mundos dentro de la misma cadena: el del espectáculo y el del rigor informativo.
Las dificultades iniciales y el legado de Piqueras
Durante el especial, Piqueras también rememoró sus complicados comienzos en Telecinco.
A su llegada en 2006, las audiencias no acompañaban y el propio Vasile le transmitió su preocupación.
“Me dijo que la cadena había apostado mucho por mí y no estaban viendo resultados.
Yo pensé: ‘Qué poco vamos a durar’”, recordó el periodista con humor.
Con el tiempo, sin embargo, logró consolidar Informativos Telecinco como uno de los espacios más fiables y seguidos de la televisión española.
Sus compañeros, entre ellos Ribagorda, subrayaron la calma y la profesionalidad con las que Piqueras afrontó los momentos más difíciles de la actualidad reciente: la crisis económica, la pandemia y los grandes acontecimientos políticos que marcaron la historia del país.
Su voz, pausada y firme, se convirtió en sinónimo de credibilidad.
Una crítica al modelo televisivo del pasado
Las palabras de Ribagorda han reabierto el debate sobre los límites entre la información y el entretenimiento en la televisión española.
Muchos espectadores recuerdan con cierta incredulidad aquellas transiciones entre Sálvame y los informativos, donde el humor y la frivolidad chocaban con las noticias de última hora.
En el contexto actual, donde las cadenas buscan equilibrar el espectáculo con la responsabilidad informativa, la reflexión de Ribagorda suena más vigente que nunca.
“No todo vale por la audiencia”, habría resumido uno de los analistas del programa. Sálvame, aunque ya desaparecido, dejó una huella profunda en el panorama audiovisual y sigue generando controversia incluso años después de su final.
El adiós de Piqueras y una televisión en transformación
El homenaje a Piqueras en En Primicia también sirvió para subrayar la transformación de la televisión española.
La retirada del periodista, anunciada hace pocos meses, marca el final de una etapa.
Con él se va uno de los últimos grandes comunicadores de la era de los informativos tradicionales.
José Ribagorda, por su parte, aprovechó el espacio para agradecer a su compañero su compromiso con el rigor y la ética profesional.
“Pedro dignificó el oficio.
Supo mantener la calma y la credibilidad incluso cuando todo parecía un circo”, apuntó en tono de reconocimiento.
La entrevista cerró con un aplauso prolongado del público y una reflexión que quedó flotando en el aire: la televisión, en su búsqueda constante de audiencia, a veces olvida su papel esencial de informar con respeto y responsabilidad.
Tanto Ribagorda como Piqueras dejaron claro que, por encima del espectáculo, debe prevalecer siempre la verdad.