La licitación, tramitada a través del Ministerio de la Presidencia, confirma que el Gobierno continúa
El Ejecutivo ha adjudicado un contrato para el suministro de puertas automáticas en un edificio del complejo presidencial de La Moncloa, por un importe total de 13.552 euros con impuestos incluidos.
La licitación, tramitada a través del Ministerio de la Presidencia, confirma que el Gobierno continúa gastando en las instalaciones de la sede del presidente.
Según el expediente oficial, el contrato incluye el suministro e instalación de puertas automáticas destinadas a un edificio del recinto gubernamental.
La descripción del objeto de la contratación detalla que se trata de puertas de acceso.
Así como de un instalador de puertas automáticas, lo que apunta a una renovación completa del mecanismo de entrada correspondiente.
Contrato de Puertas automáticas para La Moncloa
Presupuesto inicial y adjudicación
El valor estimado del contrato ascendía a 13.400 euros, con un presupuesto base de licitación de 12.000 euros sin impuestos.
Finalmente, la oferta seleccionada fija el coste en 11.200 euros sin IVA.
Lo que sitúa la cifra final en 13.552 euros una vez aplicado el impuesto correspondiente.
La adjudicación se realizó bajo el criterio de oferta económicamente más ventajosa, cumpliendo con los parámetros técnicos establecidos por el órgano de contratación.
Se recibieron un total de tres ofertas, de las cuales la sociedad seleccionada resultó la más competitiva.
La compañía seleccionada para la ejecución del encargo es Dormakaba España S.A.U., una empresa especializada en sistemas de control de acceso y automatismos.
Pedro Sánchez y su nuevo despilfarro en La Moncloa
Sin embargo, un dineral que se destina únicamente al círculo más cercano del presidente del Gobierno, eso sí, con el dinero de todos los españoles.
El Gobierno ha insistido en pedir responsabilidad y moderación en el gasto, especialmente en organismos públicos y comunidades autónomas.
Mientras continúa destinando recursos a mejoras en su propia sede.
La Moncloa es considerada un recinto estratégico y su mantenimiento es habitual.
Pero, en un momento en el que el Ejecutivo exige “priorizar lo esencial”, esta adjudicación alimenta la percepción de que las prioridades presupuestarias.
Unas no siempre coinciden con las necesidades del ciudadano común.
