El exmánager de ‘Andy y Lucas’ habla por primera vez del episodio más doloroso que vivió con el dúo gaditano, y revela detalles inéditos de su ruptura.
El expromotor de Andy y Lucas habla y asegura tenerle miedo al segundo
El programa ‘De Viernes’ de Telecinco se convirtió anoche en el escenario de una de las entrevistas más esperadas del mundo musical español.
Álvaro Molina, quien fuera durante años promotor y colaborador cercano del dúo ‘Andy y Lucas’, rompió su silencio y narró con crudeza cómo fue su relación con los artistas, especialmente en los momentos más tensos previos a su separación definitiva.
Las declaraciones han generado un auténtico revuelo.
Molina asegura que vivió un episodio “desagradable y violento” con Lucas González, uno de los integrantes del grupo.
“Me arrastró por el suelo y me pisó la pierna.
Es una persona violenta.
Yo le tengo miedo”, confesó visiblemente afectado.
“Lucas era más complicado”
Durante su entrevista, Molina quiso matizar que su relación con Andy Morales, el otro miembro del dúo, fue muy distinta.
“Andy era más dialogante, más tranquilo.
Con Lucas, en cambio, todo era más complicado”, explicó.
El exmánager relató que uno de los momentos que más le marcó fue cuando su exnovia le fue infiel con Lucas, lo que terminó por dinamitar su vínculo personal y profesional con el grupo.
“No fue solo un tema sentimental. A partir de ahí, todo cambió. Se rompió la confianza y se transformó el ambiente de trabajo”, comentó.
Aunque trató de mantener una postura profesional, Molina reconoció que los últimos años con el dúo fueron “una auténtica pesadilla”, con discusiones continuas y decisiones unilaterales que minaron su confianza en el proyecto.
Un final amargo para un grupo histórico
El dúo ‘Andy y Lucas’, uno de los más exitosos de las últimas dos décadas, anunció su separación tras 22 años de carrera conjunta, dejando un vacío en la música pop española.
Sin embargo, lo que parecía un cierre amistoso pronto se convirtió en un carrusel de declaraciones cruzadas.
Poco después de confirmarse la ruptura, Andy desveló que durante años él pagaba el sueldo de su compañero Lucas, lo que reflejaba una desigualdad interna que hasta entonces nadie conocía.
“No le veía preparado para llevar la parte empresarial de un artista”, llegó a declarar en otra entrevista.
El ambiente se fue enrareciendo con el paso de los meses, y lo que comenzó como un adiós profesional ha terminado siendo una guerra mediática.
La intervención de Álvaro Molina en De Viernes ha sido la gota que faltaba para reabrir las viejas heridas.
“Me quedo con los buenos recuerdos”
A pesar del tono de sus revelaciones, Molina aseguró que su intención no es dañar a nadie, sino contar su versión de los hechos después de años de silencio.
“Durante mucho tiempo callé, pero necesitaba explicarlo.
No tengo rencor, me quedo con los buenos recuerdos y con todo lo que conseguimos juntos”, afirmó.
El promotor reconoció que el éxito repentino de Andy y Lucas fue difícil de gestionar.
“Pasaron de cantar en pequeños locales a llenar estadios.
Eso genera presión, egos, y situaciones difíciles de manejar”, reflexionó.
Andy sigue adelante en solitario
Mientras tanto, Andy Morales continúa su camino por separado.
Ha fundado una empresa dedicada a la danza y la música en Toledo y está centrado en su nueva carrera como solista.
Su primer sencillo, titulado ‘Marioneta’, verá la luz el próximo 10 de noviembre.
Una de las frases del tema —“Quédate con tu nuevo disco y olvídate de mí”— ha desatado todo tipo de interpretaciones, ya que muchos creen que es una clara alusión a su excompañero Lucas y a la ruptura definitiva del dúo.
En redes sociales, el lanzamiento de Andy ha generado una gran expectación, especialmente entre los seguidores que crecieron con los éxitos de ‘Son de amores’ o ‘Tanto la quería’, himnos que marcaron a toda una generación.
El adiós definitivo de una era musical
El desenlace de Andy y Lucas simboliza el final de una etapa dorada del pop español. Su música, caracterizada por letras sencillas y melodías cargadas de sentimiento, acompañó a millones de oyentes durante más de dos décadas.
Hoy, con caminos separados y heridas todavía abiertas, queda la incógnita de si algún día habrá reconciliación.
Por ahora, el silencio parece ser el único punto en común entre ellos.
“Les deseo lo mejor, pero ya no formo parte de esa historia”, concluyó Álvaro Molina, poniendo punto final a un capítulo que, según confesó, le marcó profundamente tanto en lo profesional como en lo personal.
